El Salón de la Electrónica de Las Vegas es una exposición de las
tendencias tecnológicas a nivel mundial y entre todas ellas se destacan
los diversos modelos de robots, desarrollados en diversos puntos del
mundo. Diseñadas especialmente para atender necesidades específicas,
estas máquinas son capaces de informar a los usuarios a través de su
teléfono sobre los contenidos de su heladera, enviar fotos y sonidos de
cuando descansan sus hijos o encender los electrodomésticos en el
horario en que la tarifa es más baja. También están aquellos que dan
masajes, ayudan a los inválidos a caminar o acompañan a las personas
mayores haciendo de una inteligentísima mascota.
Para los miles de visitantes que se pasean por el Salón de la
Electrónica (CES) de Las Vegas, nada causa más sensación de placer que
darse un masaje por el primer robot masajista del mundo.
Estrella de la nueva sección "robótica" de la feria, el pequeño
prototipo WheeMe, de la sociedad israelí DreamBots, es capaz de ofrecer
una sesión terapéutica para deshacer las contracciones musculares.
"Hace unas cosquillas agradables", asegura Karen Slutzky, la esposa del
fundador de DreamBots, mientras el robot se pone manos a la obra con la
espalda de la mujer, echada sobre una camilla.
"Es un masaje suave, muy relajante", realizado por un vibrador de formas
redondas, cuyas ruedas están equipadas por unos sensores que evitan al
robot ceder de un lado o de otro, pero le permiten desplazarse por toda
la espalda.
"No sabe a dónde va, pero sabe dónde no debe ir", resume Slutzky.
"Estamos trabajando para darle más inteligencia, para que pueda llegar a
las nalgas y las piernas", explica Slutzky, quien espera encontrar en
Las Vegas a un socio que le permita distribuir este año al pequeño
WheeMe en Estados Unidos.
Unas casetas más allá Takatoshi Kuno, que trabaja para la sociedad
japonesa Cyberdine, hace la demostración de un traje mecanizado que
ayuda a los inválidos a caminar.
Se trata de un arnés conectado a unos piezas mecánicas situadas a lo
largo de las piernas o de los brazos, que capta las señales del sistema
nervioso para hacer mover los miembros. La fuerza de la persona que
lleva este dispositivo de semblante futurista se multiplica, hasta ser
duplicada.
"Me gustaría confeccionar el traje de Tony Stark de `Iron Man`, pero me tomaría bastante tiempo", dice sonriente Kuno.
Su creación, que pesa 23 kilos en su versión completa (15 kilos sólo
para el sistema de las piernas), ha sido alquilada ya por 160 hospitales
y centros de rehabilitación de Japón.
En otra zona, robots focas, forrados con una suave tela, han sido
declarados "accesorios médicos" por la Agencia estadounidense de
Alimentos y Medicamentos (FDA).
Su fabricante, un japonés, los presenta como ayudas terapéuticas para
personas mayores que padecen depresión o demencia. Las focas, que
cuestan 6.000 dólares cada una, están equipadas con sensores que las
hacen reaccionar con la luz, el tacto y la voz.
"Con el tiempo, la foca desarrolla una personalidad y puede ser tratada
como un auténtico animal de compañía", asegura un portavoz de la
empresa, que agrega que la diferencia con un animal real está en que
esta foca "puede ir a los lugares donde los verdaderos animales no son
aceptados".
El salón CES también ha conocido al dinosaurio Pleo RB, la tercera
versión de un juguete presentado en 2007 que responde a la temperatura y
a los olores, y sabe reconocer las voces. Si hace calor Pleo RB
(bautizado a partir de la palabra "reborn", renacer en inglés), palpita;
si se cae de una mesa, se hace daño y hay que curarlo hasta que se
recupere, según Derek Dotson, que trabaja para el fabricante Innvo Labs.
"Se le pueden enseñar itinerarios y cuando baila, incluso mueve el
trasero", asegura Dotson, que añade que el objetivo de la empresa
"siempre ha sido traspasar el límite entre la robótica y la biología".
A pesar de su costo de 469 dólares, Pleo RB, que fue puesto a la venta
unos días antes de Navidad, "está prácticamente agotado" en los
comercios.
PARA LA CASA. Los robots domésticos, creados casi todos a partir del
modelo Roomba, de la sociedad iRobot, han sumado este año una nueva
incorporación: el Windoro, de 400 dólares, que sabe limpiar los vidrios.
Se trata de una máquina ligera y cuadrada que se engancha con imanes a
los dos lados de la ventana y recorre el cristal de un lado al otro
mediante unos patines de microfibra y limpia.
Para facilitar el trabajo también los hornos, lavaplatos, lavadoras,
secadoras, heladeras y otros productos para casas "conectadas", son
exhibidos en el CES de Las Vegas. La surcoreana LG Electronics, por
ejemplo, presenta sus artículos de la línea "Thinq", que pueden ser
conectados a la red Wi-fi de la casa y controlados desde computadoras o
teléfonos.
Entre los artículos de esa firma hay lavadoras de ropa que pueden ser
activadas desde la oficina a la hora en que el usuario crea que el gasto
de energía será mas conveniente para su bolsillo, o una aspiradora
robotizada y con una cámara que puede ser activada para limpiar el piso.
También presenta una heladera con pantalla de LCD que indica a los
usuarios donde están las cosas y cuándo expira la validez de los
alimentos, datos que se pueden consultar desde el teléfono celular.
La firma Withings presenta, por su parte, monitores de bebés o de
presión sanguínea. Los primeros tienen una cámara de visión nocturna y
pueden enviar fotos y sonidos a un iPhone o a cualquier otro aparato que
tenga una pantalla conectada, para que los padres puedan chequear cómo
está el niño.